I MENSAJE CENTRAL
Sin lugar a dudas somos una generación muy bendecida, porque, entre otras cosas, nos ha tocado ver el salto de la tecnología, desde la invención del auto, la luz eléctrica, los viajes espaciales, la computadora, el internet, hasta llegar a la inteligencia artificial.
Los avances de la ciencia en estos últimos 100 años han sido increíblemente enormes comparados toda la existencia del hombre sobre la tierra.
Pero hay otro motivo, aún más grande, que nos hace saber que somos una generación muy especial a los ojos y al corazón de Dios.
Hoy Dios nos va a hablar acerca del por qué somos SU generación especial.
II INTRODUCCIÓN
Ya hemos aprendido que en el Antiguo Testamento nos podemos encontrar con Jesús, sólo hay que descubrirlo, porque recuerde que en el Antiguo Testamento Jesús está escondido y en el Nuevo Testamento Jesús está revelado, pero en toda la Biblia nos podemos encontrar con nuestro Señor Jesús.
Vamos al A.T. para introducirnos al mensaje de hoy:
(NVI) Génesis 35:16-19 “16 Después partieron de Betel. Cuando todavía estaban lejos de Efrata, Raquel (esposa de Jacob) dio a luz, pero tuvo un parto muy difícil. 17 En el momento más difícil del parto, la partera le dijo: «¡No temas; estás por tener otro varón!» 18 No obstante, ella se estaba muriendo, y en sus últimos suspiros alcanzó a llamar a su hijo Benoní, pero Jacob, su padre, le puso por nombre Benjamín.19 Así murió Raquel, y la sepultaron en el camino que va hacia Efrata, que es Belén.”
Raquel era esposa de Jacob, la que él amaba y por la que trabajó catorce años en casa de su suegro Labán.
Aquí Raquel es una figura de Cristo, dicho de otra manera, Nuestro Señor Jesús aparece escondido en lo sucedido con Raquel, porque muere para darle vida a Benjamín, quien fue el último hijo de Jacob, también llamado Israel, porque Dios le cambio el nombre, cómo Cristo murió para darnos vida eterna a nosotros. ¿Me sigue?
Así que Raquel es figura de Cristo y Benjamín es figura de nosotros, la iglesia que por la muerte de Cristo tenemos vida eterna y una vida plena y en abundancia aquí en la tierra. ¿Amén?
Entonces a la generación de Benjamín, que somos nosotros, se le conoce como “la generación de la gracia”.
De aquí que el mensaje de hoy lleva por título: UNA GENERACIÓN BAJO LA GRACIA. Somos la generación de Benjamín.
III JOSÉ TAMBIÉN ES FIGURA DE CRISTO
Esta primera parte se llama: José también es figura de Cristo.
Para poder entender y dimensionar lo que significa que somos la generación de Benjamín, debemos entender que José también es figura de Cristo.
Hay muchas similitudes entre la vida de José y la de nuestro Señor Jesucristo que nos hacen saber que José es figura de Cristo o es una tipología (un tipo) de Cristo, hoy vamos a ver sólo 10:
1) Fueron Hijos Primogénitos.
José fue el hijo primogénito de Raquel y Jesús fue el hijo primogénito de María.
2) Eran el hijo amado de su padre quien les dio una túnica especial.
(RVR60) Génesis 37:3 “3Y amaba Israel ( o sea, Jacob) a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores.”
El Padre dijo de Jesús: “Este es mi Hijo amado en quien tengo complacencia”, ¿se acuerda?.
La túnica de José era especial porque era de colores, en una época en que solo se usaban colores basados en el blanco, el negro y el café.
Y la túnica de Jesús era tan especial que los romanos no la quisieron romper, por eso la jugaron a la suerte para ver quien se la quedaba.
(RVR60) Juan 19:23(b)-24 “23… Tomaron también su túnica, la cual era sin costura, de un solo tejido de arriba abajo. 24Entonces dijeron entre sí: No la partamos, sino echemos suertes sobre ella, a ver de quién será. Esto sucedió para que se cumpliera la Escritura, que dice: Repartieron entre sí mis vestidos, y sobre mi ropa echaron suertes. Y así lo hicieron los soldados.”
3) Ambos tuvieron que ir a Egipto.
José fue llevado a Egipto como esclavo y se convirtió en el Administrador de ese reino y Jesús también vivió en Egipto.
(RVR60) Mateo 2:12 “14Y él (José de Nazaret, esposo de María), despertando, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto.”
4) Testificaron contra el pecado de sus hermanos y por eso los odiaron.
(RVR60) Génesis 37:2(b) “Pero José le contaba a su padre lo mal que se portaban sus hermanos.”
Y por eso lo echaron a la cisterna y lo vendieron como esclavos.
Y a Jesús también le pasó así:
(TLA) Juan 7:7 “7 La gente de este mundo no los odia a ustedes. Pero a mí me odia porque les digo que su conducta es mala.”
5) Ambos fueron traicionados por sus hermanos.
José fue traicionado por sus hermanos, que lo despojaron de su túnica y lo arrojaron en una cisterna y lo vendieron como esclavo, y Jesús fue traicionado por un amigo, que era más cercano que un hermano, Judas.
6) Ambos fueron vendidos por unas cuantas monedas de plata.
(RVR60) Génesis 37:28(b) “y le vendieron a los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto.”
Usted sabe que a Jesús, Judas lo vendió por treinta monedas de plata.
7) Ambos fueron puestos junto a dos criminales.
José fue encarcelado junto con el copero y el panadero del rey y Jesús fue crucificado junto a dos ladrones.
8) Uno de los criminales murió y el otro vivió.
Con José, el panadero fue llevado a la horca y el copero fue restaurado en su puesto.
Con Jesús uno de los ladrones fue al infierno por no creer en Jesús y el otro fue al paraíso con Jesús.
(RVR60) Lucas 23:42 “42Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.”
9) Fueron investidos de autoridad y poder.
José fue investido por el faraón con autoridad y poder, y se convirtió en el segundo hombre más importante del reino de Egipto.
Jesús tenía toda la autoridad y el poder que su padre la había dado.
(DHH) Mateo 28:18 “Jesús se acercó a ellos y les dijo: Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.”
10) Fueron los libertadores de su pueblo.
José fue libertador de su pueblo al darles de comer en los tiempos de la sequía de siete años (de las siete vacas flacas) y Jesús vino a ser el Salvador de su pueblo.
Hay más similitudes, usted las puede encontrar cuando lea la historia de José en el Génesis, pero estas diez similitudes, entre la vida de José y la de nuestro Señor Jesús, nos hacen saber que José es una figura de Cristo escondida en el Antiguo Testamento.
IV BENJAMÍN ES FIGURA DE LA IGLESIA BAJO LA GRACIA
Esta segunda parte se llama: Benjamín es figura de la iglesia bajo la gracia.
Déjeme contarle un poco de la historia para situarnos todos en el tiempo de José y Benjamín:
Abraham engendró, de Sara, a Isaac e Isaac engendró, de Rebeca, a Jacob y a Esaú.
Dios le cambió el nombre a Jacob por el de Israel, porque de los lomos de Jacob saldrían las doce tribus de Israel.
Jacob trabajó en casa de Labán y se enamoró de su hija menor llamada Raquel. Acordaron que él trabajaría siete años por ella, y así lo hizo, pero cuando se cumplieron los siete años, Labán no le dio a Raquel, sino a Lea, que era la hermana mayor.
Y Jacob tuvo que trabajar otros siete años para que le dieran a Raquel.
Al final de la historia, Jacob tuvo hijos con Lea, con la sirvienta de Lea y con la sirvienta de Raquel, porque Raquel era estéril, hasta ese momento.
En total Jacob tuvo diez hijos con estas tres mujeres.
El 10 es el número de la ley, los diez mandamientos, todos estos hijos representan el tiempo de la ley.
Después de que las mujeres de Jacob terminaron de darle diez hijos, Dios quitó la esterilidad a Raquel, a quien Jacob realmente amaba y le dio sus dos últimos hijos: José y Benjamín.
Como vimos anteriormente, José es figura de Cristo, figura de la gracia, porque la gracia llega después de la ley, después de los diez hijos, y Benjamín es figura de la iglesia por la que Cristo vino a darle todo.
José es figura de Jesús, que es la gracia, y Benjamín es quien recibió la gracia de su hermano mayor José.
El sueño de José y su necesidad de Benjamín.
Dios le da un sueño a Faraón con siete Vacas gordas y siete vacas flacas, y las siete vacas flacas se comían a las siete gordas, para anunciarle que venían siete años de mucha cosecha y después siete años de una gran sequía, pero Faraón no entendió y mando a que alguien le interpretara su sueño.
José, estando en la cárcel es llamado a interpretar el sueño y no sólo le interpreta el sueño sino le dice que fue lo que soñó, porque Faraón no quiso decirle a sus sabios y a José cual era el sueño, y le explica lo de la cosecha y lo de la sequía.
Y Faraón lo nombra Administrador de todo el reino de Egipto. José hace almacenes para guardar buena parte de la cosecha de esos siete años para poder resistir los siete años de sequía que vendrían después.
En el tiempo de la sequía Jacob envía a sus diez hijos (que nosotros ahora sabemos que representan a la ley) a negociar con el administrador de Faraón, que ellos no saben que es José, su hermano al que habían vendido, figura de Cristo, para que les venda granos para comer, porque la sequía era en toda esa región que incluya Israel.
BONUS:
Y José los recibe, entiende su propósito y los termina perdonando por lo que hicieron:
(NVI) Génesis 45:3-5 y 8 “3 —Yo soy José —les declaró a sus hermanos—. ¿Vive todavía mi padre? Pero ellos estaban tan pasmados que no atinaban a contestarle. 4 No obstante, José insistió: —¡Acérquense! Cuando ellos se acercaron, él añadió: —Yo soy José, el hermano de ustedes, a quien vendieron a Egipto. 5 Pero ahora, por favor no se aflijan más ni se reprochen el haberme vendido, pues en realidad fue Dios quien me mandó delante de ustedes para salvar vidas 8 Fue Dios quien me envió aquí, y no ustedes. Él me ha puesto como asesor del faraón y administrador de su casa, y como gobernador de todo Egipto.”
José entendió el propósito de Dios, siempre confió en Él, pero ahora entiende perfectamente lo que Dios hizo y quiere hacer.
Esto significa reposar en Dios, sabiendo que por mal que la estés pasando, Dios tiene un plan más grande y perfecto contigo y te va a usar grandemente para su gloria, sólo confía en Él.
Mandó a llamar a su hermano Benjamín.
Primero lo fueron a ver los diez hermanos, Jacob no quiso que Benjamín fuera con ellos, pero José (figura de Cristo) mandó a llamar a Benjamín, si es que querían que les vendieran comida. Y así lo hicieron.
(NVI) Génesis 42:14-20 “14 Pero José los increpó una vez más: —Es tal como les he dicho. ¡Ustedes son espías! 15 Y con esto lo vamos a comprobar: Les juro por la vida del faraón, que de aquí no saldrán con vida a menos que traigan a su hermano menor. 16 Manden a uno de ustedes a buscar a su hermano; los demás se quedarán en la cárcel. Así sabremos si es verdad lo que dicen. Y si no es así, ¡por la vida del faraón, ustedes son espías! 17 José los encerró en la cárcel durante tres días. 18 Al tercer día les dijo: —Yo soy un hombre temeroso de Dios. Hagan lo siguiente y salvarán su vida. 19 Si en verdad son honrados, quédese uno de ustedes bajo custodia, y vayan los demás y lleven alimento para calmar el hambre de sus familias. 20 Pero tráiganme a su hermano menor y pruébenme que dicen la verdad. Así no morirán.”
José no les iba a dar comida si no traían delante de él a su hermano de padre y madre, Benjamín, alguien por el que José tenía predilección y cuidado, lo amaba más que a todos sus demás hermanos.
Ellos trajeron a Benjamín delante de José:
(NVI) Génesis 43:29-30 “29 José miró a su alrededor y, al ver a Benjamín, su hermano de padre y madre, les preguntó: —¿Es éste su hermano menor, del cual me habían hablado? ¡Que Dios te guarde, hijo mío! 30 Conmovido por la presencia de su hermano, y no pudiendo contener el llanto, José salió de prisa. Entró en su habitación, y allí se echó a llorar desconsoladamente.”
Otras versiones en inglés dicen que José dijo: ¡Que Dios te dé misericordia y gracia, hijo mío!
Estas son las primeras palabras que el José, tipo de Cristo, le dice a Benjamín, tipo de la última iglesia de los últimos tiempos. ¡Estamos llenos de su gracia!
Por eso José es figura de Cristo y Benjamín es figura de la generación que recibe la gracia, la generación a la que el Señor vino a rescatar, la generación por la que el Padre envió a su hijo, una generación que recibe la gracia de la salvación y una vida plena llena de sus bendiciones.
Eso es lo que hizo Cristo con nosotros, nos cambió del pacto de la ley al pacto de su gracia, detuvo la ley de las obras que era implacable contra nosotros, para darnos la ley de su obra, la ley de su corazón y derramar toda su gracia y todo su favor para nosotros.
Por eso sabemos que somos la generación de Benjamín, una generación que vive bajo la gracia de nuestro Señor Jesús recibiendo todo el Favor Inmerecido del Padre sobre nosotros.
V BENDICIONES PARA LA GENERACIÓN DE BENJAMÍN
Esta última parte se llama: Bendiciones para la generación de Benjamín.
Vamos a conocer algunas de las bendiciones de la generación de Benjamín:
(NTV) Génesis 43:32-34 32 Los camareros sirvieron a José en su propia mesa, y sus hermanos fueron servidos en una mesa aparte. Los egipcios que comían con José se sentaron en su propia mesa, porque los egipcios desprecian a los hebreos y se niegan a comer con ellos. 33 José indicó a cada uno de sus hermanos dónde sentarse y, para sorpresa de ellos, los sentó según sus edades, desde el mayor hasta el menor. 34 También llenó sus platos con comida de su propia mesa, y le dio a Benjamín cinco veces más que a los demás. Entonces festejaron y bebieron libremente con José.”
Esto es lo que tiene que recibir usted por fe, las porciones de bendiciones que salen de la mesa del Señor son cinco veces más grandes para usted, si cree que es parte de la generación de Benjamín, de la generación de la gracia. ¡Aleluya! ¡Alabemos al Señor!
Y José no aguantó más y se dio a conocer a sus hermanos:
(NTV) Génesis 45:12-15 y 21-22 “ 12 »¡Miren!—agregó José—. Pueden comprobarlo con sus propios ojos, y también puede hacerlo mi hermano Benjamín, ¡que de veras soy José! 13 Díganle a mi padre acerca de la posición de honor que tengo aquí en Egipto. Descríbanle todo lo que han visto y, después, traigan a mi padre aquí lo más pronto posible». 14 Llorando de alegría, José abrazó a Benjamín, y Benjamín hizo lo mismo. 15 Luego José besó a cada uno de sus hermanos y lloró sobre ellos, y después comenzaron a hablar libremente con él. 21 Así que los hijos de Jacob hicieron lo que se les dijo. José les proporcionó carros, tal como el faraón había ordenado, y les dio provisiones para el viaje. 22 A cada uno le dio ropa nueva, pero a Benjamín le dio cinco mudas de ropa y trescientas monedas de plata.”
¿Ven el trato de José para Benjamín?
Le dio 300 monedas de plata, que, a sus hermanos “los de la ley” no les dio, por haberlo rechazado, y le dio cinco veces más alimento y cinco veces más ropas.
La generación de Benjamín recibe abundancia de comida y ropas, (comida para los hombres y ropas para las mujeres, no, es broma)
Lo qué significan alimentos y ropas.
El alimento se refiere a la provisión, Dios les da a los hijos de Benjamín cinco veces más provisión que a los de la ley.
Las ropas significan 5 unciones diferentes, la semana pasada pedimos una unción para nuestros propósitos, hoy tenemos que son cinco diferentes unciones de parte del Espíritu Santo, ya no tienes sólo la unción de mamá, por ejemplo, sino también de esposa, de empresaria, de profeta y de deportista, por ejemplo.
5 unciones diferentes, la de esposo, de padre, de pastor, de empresario, y escritor, etc.
Esa es la victoria para la generación de Benjamín, una generación bajo la gracia que recibe cinco veces más de todas las más bendiciones que cualquiera de las generaciones anteriores.
Eso viene para nosotros ¡Aleluya!