ADICTOS A LOS”LIKES”. La trampa de la aprobación.

Hoy Dios nos va a enseñar en su palabra como no ser adictos a la aprobación de la gente.

II          INTRODUCCIÓN

Hoy las redes sociales no sólo han evidenciado nuestra necesidad de aprobación y reconocimiento, sino que la han convertido en una prioridad y hasta en una adicción.

A todos nos gusta que nuestras publicaciones tengan estos símbolos de “like” o “me gusta” (👍👌👊❤️).

Aún fuera de las redes sociales, a todos nos gusta que nos digan “buen trabajo” o “bien hecho”, a todos nos gusta esa “palmadita” de aprobación en la espalda o en el hombro.

Pero ese “gusto”, que más bien ya va siendo una “necesidad”, se vuelve un problema cuando al no recibir estos símbolos de “like” o estas muestras de aprobación nos sentimos rechazados o no suficientemente buenos e inseguros acerca de nuestro valor propio.

Se vuelve un problema cuando comenzamos a obsesionarnos con lo que la gente piensa de nosotros o cuando comparamos los “likes” que nos dan a nosotros con los que les dan a otros.

La Biblia dice:

(TLA) Proverbios 29:25 “²⁵ Si tienes miedo de la gente, tú mismo te tiendes una trampa; pero si confías en Dios estarás fuera de peligro.”

Estar obsesionados con lo que opina la gente de nosotros y querer crear un estilo de vida basado en lo que otros quieren de nosotros es tan malo como cualquier adicción y nos puede desviar de nuestros propósitos. 

De aquí que el mensaje de hoy lleva por título: ADICTOS A LOS “LIKES”. La trampa de la aprobación.

III      EL PELIGRO DE LA ADICCIÓN A LOS “LIKES”

Esta primera parte se llama: El peligro de la adicción a los likes.

La Biblia narra acerca de un personaje que fue adicto a los “likes” de la gente, a su nombre es Saúl, primer rey de Israel.

Veamos un poco de su historia:

Después de la época de que Israel fue gobernada por jueces, el pueblo pidió a Dios un rey, como tenían los demás pueblos vecinos, y Dios se los concedió, y le ordenó a Samuel, que era su sacerdote, y había sido de los últimos jueces, junto con sus hijos, que buscara un hombre para ungirlo como rey de Israel, ese primer rey fue Saúl.

Saúl tenía muy buena apariencia:

(NTV) 1 Samuel 9:2 “ ² Su hijo Saúl era el hombre más apuesto en Israel; era tan alto que los demás apenas le llegaban a los hombros.”

Saúl era muy guapo y más alto que todos en Israel, o sea, que tenía una muy buena apariencia.

Saúl era un ganador:

(NTV) 1 Samuel 14:47-48 "⁴⁷ Cuando Saúl aseguró su posición de rey sobre Israel, peleó contra sus enemigos en todas las direcciones: contra Moab, Amón, Edom, los reyes de Soba y los filisteos. Y dondequiera que iba, obtenía la victoria. ⁴⁸ Realizó grandes proezas y conquistó a los amalecitas y así salvó a Israel de todos aquellos que lo habían saqueado.”

A donde quiera que peleaba Saúl obtenía la victoria y eso le dio una gran aprobación para con el pueblo de Israel, pero veamos como terminó el reinado de Saúl.

Dios le dijo a Saúl a través de Samuel:

(NTV) 1 Samuel 15:3-31(sólo algunos) “³ Ve ahora y destruye por completo a toda la nación amalecita: hombres, mujeres, niños, recién nacidos, ganado, ovejas, cabras, camellos y burros”». ⁷ Luego Saúl mató a los amalecitas desde Havila hasta llegar a Shur, al oriente de Egipto. ⁹ Saúl y sus hombres le perdonaron la vida a Agag y se quedaron con lo mejor de las ovejas y las cabras, del ganado, de los becerros gordos y de los corderos; de hecho, con todo lo que les atrajo. Solo destruyeron lo que no tenía valor o que era de mala calidad. ¹³ Cuando por fin Samuel lo encontró, Saúl lo saludó con alegría. —Que el Señor te bendiga—le dijo—. Llevé a cabo el mandato del Señor. ¹⁴ —Entonces, ¿qué es todo ese balido de ovejas y cabras, y ese mugido de ganado que oigo? —le preguntó Samuel. ¹⁷ Y Samuel le dijo: —Aunque te tengas en poca estima, ¿acaso no eres el líder de las tribus de Israel? El Señor te ungió como rey de Israel, ¹⁸ te envió en una misión y te dijo: “Ve y destruye por completo a los pecadores—a los amalecitas—hasta que todos estén muertos”. ¹⁹ ¿Por qué no obedeciste al Señor? ¿Por qué te apuraste a tomar del botín y a hacer lo que es malo a los ojos del Señor? ²⁰ —¡Pero yo sí obedecí al Señor! —insistió Saúl—. ¡Cumplí la misión que él me encargó! Traje al rey Agag, pero destruí a todos los demás. ²¹ Entonces mis tropas llevaron lo mejor de las ovejas, de las cabras, del ganado y del botín para sacrificarlos al Señor tu Dios en Gilgal. ²² Pero Samuel respondió: —¿Qué es lo que más le agrada al Señor: tus ofrendas quemadas y sacrificios, o que obedezcas a su voz? ¡Escucha! La obediencia es mejor que el sacrificio, y la sumisión es mejor que ofrecer la grasa de carneros. ²³ La rebelión es tan pecaminosa como la hechicería, y la terquedad, tan mala como rendir culto a ídolos. Así que, por cuanto has rechazado el mandato del Señor, él te ha rechazado como rey. ²⁴ Entonces Saúl le confesó a Samuel: —Es cierto, he pecado. He desobedecido tus instrucciones y el mandato del Señor, porque tuve miedo del pueblo y por eso hice lo que ellos me pidieron. ²⁵ Pero ahora, por favor, perdona mi pecado y regresa conmigo para que pueda adorar al Señor. ²⁶ Pero Samuel respondió: —¡No volveré contigo! Ya que tú rechazaste el mandato del Señor, él te ha rechazado como rey de Israel. ³⁰ Entonces Saúl volvió a implorar: —Sé que he pecado. Pero al menos te ruego que me honres ante los ancianos de mi pueblo y ante Israel al volver conmigo para que adore al Señor tu Dios. ³¹ Entonces Samuel por fin accedió y regresó con él, y Saúl adoró al Señor.”

Saúl fue destituido como rey de Israel por su adicción a la opinión de la gente, por su adicción a sus “likes”.

Prefirió temerles a ellos que, a Dios, fue capaz de mentirle a Samuel diciendo que sí había obedecido a Dios, cuando él sabía en lo profundo de su corazón que había hecho lo que la gente le pidió hacer en vez de lo que Dios le pidió.

Evidencia adolescente y más.

Esta “necesidad de aprobación y aceptación” se ve mucho en los adolescentes, que por querer sentirse “parte de”, llegan a hacer cosas que saben que a Dios ni a sus padres les agradan, sólo porque se lo pidieron sus amigos y ellos quieren pertenecer a “ese círculo de amigos”.

Pero, parece que esa “adicción a los likes” de los amigos no desaparece cuando dejamos la adolescencia, sólo tal vez, se hace menos evidente, pero ahí puede seguir.

Ahora de adultos te puedes dar cuenta que la opinión que tuvieron tus padres de ti cuando eras niño te sigue afectando, o la opinión que tuvo algún afecto importante en tu vida o la que ahora tienen tus hijos, o tu esposo o esposa, o la que tiene tu jefe o tus compañeros de trabajo o amigos, te sigue impactando, al grado que tus estados de ánimo cambian dependiendo de sus comentarios u opiniones.

Y sobre todo, que esas opiniones no “te dejan” hacer la voluntad de Dios.

Así que podemos concluir esta parte diciendo que el peligro de la adicción a los “likes” y la opinión de la gente puede hacernos perder el rumbo de nuestros propósitos dados por Dios.

IV     VIVIENDO POR ENCIMA DE LOS “LIKES” DE LA GENTE

Esta segunda sección se llama: Viviendo por encima de los “likes” de la gente.

 David y Saúl fueron muy parecidos en varias cosas.

La Biblia narra que ambos eran muy guapos, fueron guerreros victoriosos, a ambos los ungió Dios como reyes de Israel y ambos tuvieron la presencia de Dios en sus vidas, sin embargo, sus trayectorias y legados fueron completamente diferentes.

Hoy la bandera de Israel hondea la estrella de David mientras que el nombre de Saúl es sinónimo de desobediencia.

Veamos cuál fue la diferencia:

David, como rey, también enfrentó a los amalecitas que dejó vivos Saúl y repusieron su ejército.

(NTV) 1 Samuel 30:1-9 y 17-20 “¹Tres días después, cuando David y sus hombres llegaron a su casa en la ciudad de Siclag, encontraron que los amalecitas habían asaltado el Neguev y Siclag; habían destruido Siclag y la habían quemado hasta reducirla a cenizas. ² Se habían llevado a las mujeres y a los niños y a todos los demás, pero sin matar a nadie. ³ Cuando David y sus hombres vieron las ruinas y se dieron cuenta de lo que les había sucedido a sus familias, ⁴ lloraron a más no poder. ⁵ Las dos esposas de David, Ahinoam de Jezreel y Abigail, la viuda de Nabal de Carmelo, estaban entre los que fueron capturados. ⁶ David ahora se encontraba en gran peligro, porque todos sus hombres estaban muy resentidos por haber perdido a sus hijos e hijas, y comenzaron a hablar acerca de apedrearlo. Pero David encontró fuerzas en el Señor su Dios. ⁷ Entonces le dijo a Abiatar, el sacerdote: —¡Tráeme el efod! Así que Abiatar lo trajo ⁸ y David le preguntó al Señor: —¿Debo perseguir a esta banda de saqueadores? ¿Los atraparé? Y el Señor le dijo: —Sí, persíguelos. Recuperarás todo lo que te han quitado. ⁹ De modo que David y sus seiscientos hombres salieron y llegaron al arroyo de Besor. ¹⁷ Entonces David y sus hombres se lanzaron contra ellos y los mataron durante toda la noche y durante todo el día siguiente hasta la tarde. Ninguno de los amalecitas escapó, excepto cuatrocientos jóvenes que huyeron en camellos. ¹⁸ Así que David recuperó todo lo que los amalecitas habían tomado y rescató a sus dos esposas. ¹⁹ No faltaba nada: fuera grande o pequeño, hijo o hija, ni ninguna otra cosa que se habían llevado. David regresó con todo. ²⁰ También recuperó los rebaños y las manadas, y sus hombres los arrearon delante de los demás animales. «¡Este botín le pertenece a David!», dijeron.”

Eran dos situaciones muy diferentes, por un lado, Saúl atacó a los amalecitas, a David lo atacaron los amalecitas y se llevaron a sus mujeres y a sus hijos.

Después David pudo haber escuchado la voz de sus guerreros por el estrés que implicaba que estuvieran tan enojados con él y quisieran hasta apedrearlo.

Pero David vivía por encima de los “likes” de la gente, vivía por encima de las opiniones de la gente, él vivía escuchando sólo la voz de Dios, por eso le pide al sacerdote Abiatar el efod de lino que usaba para consultar a Dios y David consulta a Dios de qué es lo que tiene que hacer y eso hace, y la victoria fue total.

Es probable que hoy te des cuenta que has querido agradar más a la gente que a Dios, que has escuchado más las voces de la opinión y “likes” que la gente tiene de ti que la de Dios, y eso sea lo que te tenga atrapado en esa situación de dualidad en la que te encuentras o en esa situación de problema, porque has querido hacer las cosas conforme al hombre y no conforme a Dios.

Podemos concluir esta parte diciendo que si queremos una vida victoriosa debemos aprender a vivir por encima de los “likes” (me gusta) de la opinión de la gente.

V          INMUNES A LA ADICCIÓN A LOS “LIKES”

Esta última parte se llama: Inmunes a la adicción de los “likes”.

La pregunta aquí sería ¿Cómo ser inmunes a la adicción a los “likes”?

David nos lo enseña en otro momento donde fue muy expuesto a la opinión de la gente y él supo como ser inmune a esos “likes”.

Cuando David derrotó a Goliat, regresó a Jerusalén con la cabeza del gigante en una mano y todo el pueblo comenzó a vitorearlo:

(NTV) 1 Samuel 18:6-9 “⁶ Cuando el ejército de Israel regresaba triunfante después que David mató al filisteo, mujeres de todas las ciudades de Israel salieron para recibir al rey Saúl. Cantaron y danzaron de alegría con panderetas y címbalos. ⁷ Este era su canto: «Saúl mató a sus miles, ¡y David, a sus diez miles!». ⁸ Esto hizo que Saúl se enojara mucho. «¿Qué es esto?—dijo—. Le dan crédito a David por diez miles y a mí solamente por miles. ¡Solo falta que lo hagan su rey!». ⁹ Desde ese momento Saúl miró con recelo a David.”

Imagínese la escena, en ese momento David “se hizo viral”, todo el pueblo salió a cantar un himno que glorificaba más a David que a Saúl.

David era un jovencito de unos 15 o 17 años y eso pudo haberlo convertido en un adicto a los “likes” de la gente ¿no cree? Pero no fue así, según vimos hace un momento.

Entonces ¿Dónde radicó el secreto de David para vivir una vida por encima de los “likes” de la gente?

Vayamos a la Biblia a ver cuándo David regresó a Jerusalén el arca del Pacto:

(NTV) 2 Samuel 6:14-19 “¹⁴ Y David danzó ante el Señor con todas sus fuerzas, vestido con una vestidura sacerdotal. ¹⁵ David y todo el pueblo trasladaron el arca del Señor entre gritos de alegría y toques de cuernos de carnero. ¹⁶ Entonces, cuando el arca del Señor entraba a la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, se asomó por la ventana. Cuando vio que el rey David saltaba y danzaba ante el Señor, se llenó de desprecio hacia él. ¹⁷ Así que trasladaron el arca y la colocaron en su lugar dentro de la carpa especial que David le había preparado. David sacrificó al Señor ofrendas quemadas y ofrendas de paz. ¹⁸ Cuando terminó de ofrecer los sacrificios, David bendijo al pueblo en el nombre del Señor de los Ejércitos Celestiales. ¹⁹ Después repartió a todos los israelitas que estaban allí reunidos, tanto hombres como mujeres, una hogaza de pan, un pastel de dátiles y un pastel de pasas de uva. Luego todos regresaron a su casa.”

David estaba de fiesta, después de setenta años en que el arca estuvo abandonada, él pudo regresarla a Jerusalén.

La importancia del arca es que hoy entendemos que era una figura de Cristo, por eso Dios dijo que David era un hombre conforme a su corazón.

Pero la fiesta se “aguadó” cuando David regresó a su casa:

(NTV) 2 Samuel 6:20 “ ²⁰ Cuando David regresó a su hogar para bendecir a su propia familia (con la comida del festejo), Mical, la hija de Saúl, salió a su encuentro y le dijo indignada: —¡Qué distinguido se veía hoy el rey de Israel, exhibiéndose descaradamente delante de las sirvientas tal como lo haría cualquier persona vulgar!”

No era cualquier opinión, era la opinión de su propia esposa.

Este no era un “like”, más bien era un “dislike”, una cara de enojo con frase impronunciable en la boca ¿La conoce? 🤬 ¿La ha usado? Espero que no, ja, ja, ja 🤣.

Pero eso fue lo que dijo Mical, esposa de David.

La adicción a los “likes” provoca que cuando no somos aprobados por la gente nos derrumbamos y estamos dispuestos a hacer o dejar de hacer lo que dicen para “encajar” en su molde.

Aquí David pudo haber dicho: “¡Perdóname mi amor, no lo vuelvo a hacer! Ahora mismo regreso el arca a donde estaba”, pero no, David no dijo nada parecido a eso:

(NTV) 2 Samuel 6:21-22 “ ²¹ David le replicó a Mical: —¡Estaba danzando delante del Señor, quien me eligió por encima de tu padre y de su familia! Él me designó como el líder de Israel, el pueblo del Señor, y de este modo celebro delante de él. ²² ¡Así es, y estoy dispuesto a quedar en ridículo e incluso a ser humillado ante mis propios ojos! Pero esas sirvientas que mencionaste, ¡de seguro seguirán pensando que soy distinguido! ²³ Y Mical, la hija de Saúl, nunca tuvo hijos en toda su vida.”

Esta es la razón por la que David no era adicto a los “likes” de la gente: Porque se sabía escogido por Dios y esa era la voz que él seguía.

El más importante “like” para David era el “like” de Dios, y ese tiene que ser también el nuestro.

Nosotros también somos escogidos de Dios.

Los hijos de Dios no estamos hechos para “encuadrar a la perfección” en una sociedad, que como hemos dicho en semanas anteriores, se cae a pedazos en sus valores y parámetros de vida.

Por eso el apóstol Pablo dijo a los efesios:

(NVI) Efesios1:3-6 “³Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. ⁴Dios nos escogió en él antes de la creación del mundo, para que seamos santos y sin mancha delante de él. ⁵En amor nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, según el buen propósito de su voluntad, ⁶para alabanza de su gloriosa gracia, que nos concedió en su Amado.”

Debemos ser sabios para vivir una vida reflejados por el amor y la luz de Cristo y saber que el Padre nos ha escogido desde el vientre de nuestra madre para llevar a cabo un propósito único y especial.

Y para ello debemos seguir la voz de Dios, no la voz de la gente.

Dios usa a la gente para hablarte, como lo está haciendo ahora conmigo, pero debes distinguir cuando detrás de la voz de la gente, no está Dios.

Podemos concluir esta sección diciendo que la manera como podemos ser inmunes a la adicción a los “likes” de la gente, recordando en todo tiempo que somos escogidos de Dios, esto es, es siendo “adictos a los likes de Dios”

VI         MINISTRACIÓN

Vivir para la aprobación de la gente es una trampa muy peligrosa que te alejará del cumplimiento de tus propósitos.

Vivamos buscando siempre la aprobación de Dios y esa nos la da la obra de amor consumada en la cruz por nuestro Señor Jesús.

Dejemos que su amor nos llene y su voz nos haga saber para donde debemos dirigir nuestros oídos.

Seguro no será hacia la gente que no conoce a Dios como lo conocemos tú y yo.

Amén.